Por fin salió el libro ¡Ahí queda eso!, Graffiti Zamora, de Miguel Núñez y Carmen Castaño.
Land fue el encargado de presentarlo el día 13 de noviembre en Sala de cura. Estaban todos: los autores, los graffiteros, un buen montón de amigos y público que sabía de la existencia del libro y estaban deseando conocerlo, y los responsables de la sala que la cedieron generosamente para la presentación.
¡Ahí queda eso! incluye un capítulo dedicado a graffitis hoy desaparecidos de los muros de la ciudad, que proceden de los archivos personales de los artistas, así como textos de los grafitteros y otra gente de la cultura explicando lo que el graffiti significa para ellos. El libro puede ya adquirirse en la librería al precio de 21'50 €, y en Barcelona es distribuido por la empresa Montana Colors.
La introducción que hacen Miguel Núñez y Carmen Castaño explica cómo y por qué se fraguó este libro :
Un día cualquiera un graffiti entra en tu cámara fotográfica. Ese mismo día se cuela en el ordenador y parece pedirte que lo mires, o ¡que lo admires!
Desde la pantalla, y ya con voz propia, exige que vuelvas al sitio donde lo encontraste y le traigas a sus compañeros de pared.
A partir de ahí, desde hace un año, no hemos hecho otra cosa que obedecer al último graffiti que hemos traído a casa. Él nos indica a dónde debemos ir a recoger a sus colegas, unas veces lejos y otras a la vuelta de la esquina.
Parece un cuento de J.J Millás, ¿verdad? Pero no. Ésta es la forma en que fuimos abducidos por un graffiti para que pusiéramos en marcha el proyecto ¡Ahí queda eso!
Ved una muestra de los graffitis que podéis encontrar en el interior del libro :
Faer
Parsec
Sex
Snakeh
Taws
Yuma
(Crónica de Raúl Vacas. Salamanca, 14 de noviembre de 2010)
